Hoy fue un día bastante inusual, bueno aún no termina, son las nueve y cincuenta y seis minutos, y a parte de que es lunes,!!! y que vuelto a este blog con el que a veces me enemisto, hoy ha sido un día poco común.
He temblado tanto que parece que me hubiese dado una especie de parkinson prematuro, al mediodía choqué, bueno me chocaron y Dios - y un payasito- son mis testigos que yo no tuve la culpa, el otro conductor, un bodeguero con cara de pocos, poquisimos amigos, aceptó la culpa gracias a - o debido a - suena mejor, la presión que ejerció la policía y a la evidente torpeza evidenciada al intentar cruzar del carril derecho hacia la izquierda y en pleno alto, me dañó el carro y me dañó el día, lo peor, me dio tremendo, tremendisimo susto, de tanto que temblaba no podía ni volver a encender el carro para moverle del sitio del impacto - donde habíamos provocado una apocalíptica trabazón- hacia otro más seguro...temblaban tanto mis manos que me dio harto miedo...al final de la tarde, luego de policías y aseguradoras, de mirar portadas, discutir fotos y mirar de reojo el correo me sentía profundamente cansada, cuando llegué a casa, sentía una especie de sopor, harta, cansada, un cansancio de esos que uno siente cuando ha llorado mucho o ha sufrido horrible...o ha tenido miedo, como me sucedió hoy...al final, ya con la pijama puesta, hace menos de una hora, tembló, fue un movimiento telúrico, como dirán después en las noticias, de seis punto uno grados en la escala de ritcher, horrible, mi corazón se aceleró, me temblaban los pies y de nuevo las manos, tuve tanto miedo...tanto miedo...no sé si ya dejó de temblar, porque yo sigo asustada, he pasado tres terremotos y millares de temblores en este país de .....fallas en el que me tocó vivir y que tiene tantos temblores como conductores estúpidos...el caso es que he temblado tanto hoy, me siento todavía más cansada...y no estoy segura que pueda dormir, en fin...al menos volví al blog...
